sábado, 24 de noviembre de 2012

Los 10 alimentos "quemagrasa"

Mucho se habla sobre sus propiedades pero poco se sabe efectivamente sobre ellos. ¿Cómo funcionan? ¿Realmente nos ayudan a adelgazar? ¿Cómo y cuándo debemos consumirlos? Del milagro a la realidad, las respuestas en esta nota.

El nombre llama la atención: alimentos "quemagrasa". Pero... ¿Cuánto hay de verdad en esto? Poco.

En realidad, lo que ellos hacen es ayudar a una buena digestión, acelerar el metabolismo y evitar la retención de líquidos. La idea es incluirlos en nuestra dieta, sin caer en excesos y recordando, siempre, que el secreto está en comer de todo, variado y en porciones medidas.

El Top 10

-Chocolate amargo.

Además de tener una gran cantidad de antioxidantes y no incluir azúcar en su composición, lo más importante es que posee grasas monoinsaturadas que ayudan y generan una sensación de saciedad que se prolonga en el tiempo.

-Lechuga.

Verdura de hoja verde por excelencia, es un infaltable de toda ensalada. Además de ser diurética, esta hortaliza es una gran fuente de hierro y fibras.

-Lácteos descremados. Si bien los lácteos generan polémica y opiniones encontradas , tanto las proteínas como el calcio que aportan a nuestro menú cotidiano son una gran ayuda para acelerar el funcionamiento del metabolismo.

- La Vitamina C.

Presente en los cítricos, el kiwi y el morrón, mejora el sistema inmune, baja los niveles de insulina de manera natural y ayuda al cuerpo a quemar calorías.

-Cereales. Es fundamental incluirlos en nuestro menú ya que son una gran fuente de energía y colaboran en la reducción de grasa al realizar actividad física. Además, son esenciales a la hora de bajar el nivel de colesterol.

-Apio.

Más allá de ser un excelente afrodisíaco, el apio es un excelente diurético.

-Remolacha.

Es desintoxicante y depurativa.

-Ajo y cebolla.

¡Olvidate del mal aliento ! Estos alimentos son excelentes para activar la circulación y regular la glucemia.

-Pescado.

Es el alimento más rico en ácidos grasos Omega 3 , esenciales para regular el nivel de colesterol y agilizar el funcionamiento del organismo.

-Frutas.

En especial las que tienen pectina, como la uva o la manzana. El tipo de fibra que aportan colabora en brindar sensación de saciedad y eliminar toxinas. fuente

MAS INFO: http://buenasiembra.com.ar/salud/fitoterapia/adelgazar-con-infusiones-630.html

http://buenasiembra.com.ar/salud/terapias-alternativas/rejuvenecer-adelgazar-1275.html

http://buenasiembra.com.ar/salud/terapias-alternativas/adelgazar-con-la-luna-1388.html

domingo, 18 de noviembre de 2012

Nutrición para mantenernos jóvenes


Lo que comemos puede rejuvenecernos o envejecernos prematuramente.

Somos la suma de lo que comemos y la manera cómo lo ingerimos. (en agradecimiento, angustiados, apurados... )

En nuestra sociedad contemporánea es común encontrar personas que opinan que comer mucho es equivalente a buena salud y larga vida.

Sin embargo, si miramos los consejos que se han ofrecido a través de los siglos para alcanzar una vida larga y saludable encontramos que uno de los factores que más se menciona es el de una dieta frugal.

Cuando a principios de este siglo el médico inglés G.M. Humphrey revisó los hábitos de 52 personas que habían alcanzado los cien años de edad encontró, entre otras cosas, que éstos comían poco o moderadamente y consumían muy poca carne.

De hecho, durante siglos se ha hablado de las virtudes del comer poco para una larga vida. No en balde decía Miguel de Cervantes "come poco y cena menos, que la salud de todo el cuerpo se fragua en la oficina del estómago".



En el siglo XV un noble de Venecia llamado Luiggi Cornaro comenzó, a los 37 años de edad y tras haber pasado una juventud dedicada a las fiestas y la bebida, a cambiar su estilo de vida por uno que le permitiera vivir 100 años y mantenerse saludable. Como resultado Cornaro vivió hasta los 103 años de edad manteniéndose activo y con su mente clara hasta el final.

El método que empleó para lograr esto consistió en abstenerse de bebidas alcohólicas y comer muy poco.
De hecho a partir de los 37 años de edad la dieta de Cornaro puede clasificarse como una especie de semi-ayuno.

Siglos después la receta de Cornaro y Cervantes ha sido validada por los científicos.

El Dr. Roy Walford, conocido gerontólogo de la Universidad de California en Los Angeles ha diseñado una dieta para seres humanos basada en estas premisas. Es una dieta que durante varios años va gradualmente reduciendo el número de calorías que ingerimos hasta llevarlo al 60% de lo que se consume normalmente.

La idea de hacerlo gradualmente surge del hecho de que si tratamos de bajar abruptamente la cantidad de comida que ingerimos seguramente tendremos problemas de ajuste ya que nuestro metabolismo no está preparado para tal reducción.

Al hacerlo gradualmente permitimos que los mecanismos del cerebro que regulan el metabolismo y el hambre se ajusten. Walford cree que con una dieta así cualquier persona puede alcanzar 120 años de edad y quizá más.

Es importante no confundir una dieta restringida en calorías con una mala nutrición.

Es sumamente importante seleccionar bien los alimentos para que tengamos una cantidad adecuada de vitaminas y minerales.
Por tanto es esencial eliminar los alimentos que contienen calorías vacías

§ como bizcochos,
§ galletas,
§ helados,
§ papitas fritas,
§ azúcar y grasas.

Especialmente importante es la reducción de la cantidad de calorías derivadas de las grasas. En la dieta típica occidental entre un 35 y un 40% de las calorías provienen de las grasas.

La "dieta de arroz" desarrollada en la Universidad de Duke está basada en un consumo extremadamente bajo de grasas como medio de controlar el peso y controlar o revertir diversas enfermedades. En la actualidad la dieta de este tipo que más publicidad ha recibido es la desarrollada por el cardiólogo californiano Dean Ornish.

Por medio de una dieta vegetariana con no más de un 11% de las calorías derivadas de la grasa combinada con un régimen de ejercicios aeróbicos moderados y técnicas de meditación y relajación para el manejo del estrés muchos de los pacientes del Dr. Ornish han logrado revertir condiciones cardiacas, destapar arterias bloqueadas y mejorar el flujo de sangre hacia el cerebro.



A pesar de estos resultados existen quienes señalan que para lograr los beneficios logrados por el Dr. Ornish no es necesario y ni siquiera conveniente reducir tan drásticamente la cantidad de grasas ingeridas.

Este es el caso del Dr. Walter Willett, profesor de nutrición de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard. Para Willett la evidencia no necesariamente indican que los resultados obtenidos por Ornish se deban a la reducción en la cantidad de grasas ingeridas ya que el programa de Ornish incluye otros factores como el ejercicio y la meditación que pueden también tener efectos considerables.

Para Willett lo importante no es la mera reducción en la cantidad de grasas sino el tipo de grasa que consumimos. De hecho dice Willett que algunos tipos de grasa son beneficiosos al organismo. Willett promueve lo que se ha dado por llamar la "dieta mediterránea".

Esta dieta se basa en el tipo de alimentación seguido por gran número de personas en Creta, Grecia y el sur de Italia. Se ha encontrado que a pesar de que la dieta en estas regiones es relativamente alta en grasas - por ejemplo, en Grecia alrededor del 40 por ciento de las calorías provienen de la grasa - los habitantes tienen una de las tasas más bajas de enfermedades crónicas y cardiacas en el mundo.

La clave de estos resultados según Willett está en que la dieta mediterránea es alta en grasas pero baja en grasas de origen animal. Esta dieta pone énfasis en las frutas, vegetales, granos, pastas y habichuelas.
Las grasas que se consumen son primordialmente de origen vegetal.
El aceite de oliva es la principal fuente de grasas.
El aceite de oliva es rico en grasas monoinsaturadas sobre las cuales según Willett existe abundante evidencia que las señala como buenas para la salud.



La dieta mediterránea según Willett también "enfatiza en los granos integrales lo cual es más saludable que los carbohidratos y almidones procesados que poseen menos nutrientes y fibra".
La dieta mediterránea distingue entre los distintos tipos de grasa, siendo los de origen vegetal a los que se les otorga una mayor prominencia.

Por otra parte, no se recomienda que se ingiera carne roja más de unas pocas veces al mes. Esto, más que una recomendación, es una concesión a las personas incapaces de dejar ésta totalmente.

Dice Willett "si miramos a los datos debemos concluir que la cantidad de carne roja que debemos ingerir es cero". De hecho, en la pirámide de la dieta mediterránea la carne roja aparece como aún menos deseable que los dulces. La pirámide mediterránea tiene también la particularidad de que además de medidas puramente dietéticas también recomienda el llevar a cabo ejercicios diarios.

Otra alternativa viable para muchas personas es la del ayuno ocasional.

En la India existe una tradición según la cual se puede lograr una larga vida practicando un día de ayuno a la semana. Durante ese día los únicos alimentos que se ingieren son jugos de frutas, agua tibia con miel o leche baja en grasas. Con esto se busca que el sistema digestivo descanse, recupere su balance y se deshaga de las impurezas y toxinas acumuladas.

Es importante señalar que no sólo en la India sino que en muchas tradiciones religiosas y espirituales existen personas que han seguido estos principios y han vivido hasta edades muy avanzadas.

Según Deepak Chopra, conocido escritor y experto en temas de salud y longevidad que combina la medicina convencional con las antiguas tradiciones orientales, la clave para el éxito en cualquier dieta o ayuno que practiquemos está en desarrollar un estilo de vida en el cual el ayuno no se vea como un castigo ni como una disciplina sino como un refugio o descanso de la actividad cotidiana.

Cuando ayunamos, el tiempo que ordinariamente dedicamos a comer lo dedicamos a permanecer quietos con nosotros mismos.

De esta manera el cuerpo participa de un sentimiento de paz y armonía.

Por: Rafael Valle Rivera

Fuente: www.saludparati.com